La historia de Rosmas se remunta al año 1925 cuando su fundador, Josep Ros Capdevila, hijo de Francesc Ros Caba, de una manera muy modesta y artesanal empezó a elaborar vino espumoso, como así se llamaba entonces. TRADICIÓN FAMILIAR En la finca de Can Guineu conreaba las viñas artesanamente. Una tercera parte del cultivo lo destinó a la elaboración de vino para su consumo personal. En el año 1942 con los datos que le dejó su padre (alumno de Alfredo Delapierre en la implantación del método “champanoise” en este país) empezó a hacer las primeras botellas de cava para el consumo familiar. Con el tiempo, amigos y conocidos, empezaron a comprar algunas botellas, hecho que le hizo pensar en dedicarse plenamente a la elaboración de cava. Actualmente Rosmas (etimología de los apellidos Ros Masana) es una empresa familiar gestionada por Jaume Ros Amigó, tercera generación que a seguido fiel a su tradición.