Languedoc-Rosellón – la región vitivinícola más grande del mundo
Languedoc-Rosellón se extiende desde la Provenza, a lo largo de la costa mediterránea hasta Cataluña en España. 220.000 hectáreas de viñedo. Casi el doble que Burdeos, por ejemplo, que abarca 120.000 hectáreas.
La historia vitivinícola de Languedoc-Rosellón se remonta a una zona cercana a Narbona con la llegada de los griegos hace 2500 años. ¡Y esos viñedos, aunque no las cepas, todavía están allí! Junto con algunos de la Provenza, estos son los viñedos más antiguos de Francia.
La transformación vitivinícola
Durante unos 1500 años, a partir del año 400, Languedoc-Rosellón era conocida por la calidad de sus vinos. De hecho, se llegaron a utilizar vinos de la zona en los primeros hospitales por sus "poderes curativos".
Luego, desde principios de la década de 1900 y con la revolución industrial, la región se empezó a dedicar a la producción masiva de vino tinto barato para el consumo diario, y se mantuvo así durante mucho tiempo.
En los últimos años, el Languedoc-Rosellón ha experimentado una radical transformación. Aún se pueden encontrar muchos vinos industriales y poco interesantes de la región en los supermercados de Europa. Pero escondido, imperceptible aún para muchos amantes del vino, hay un tesoro de excelentes vinos bien elaborados, de alta calidad, a precios asequibles. Estos vinos están empezando a poner de nuevo al Languedoc-Rosellón en el mapa mundial de los grandes vinos. Te animamos a que los pruebes. Puedes empezar a descubrirlos aquí en Avelyn.
El Languedoc
La región, como indica su nombre, está dividida en dos sub-regiones, El Languedoc y el Rosellón. La primera es, de largo, la más grande de las dos, abarcando desde las montañas de Corbières (interior y norte de Narbonne y Carcasonne) hasta más allá de Nimes.
La mayor parte de los viñedos se encuentran en las llanuras junto a la costa mediterránea. Es una zona árida y de veranos calurosos, con la sequía como amenaza recurrente, que puede resultar un problema dadas las estrictas limitaciones de riego en muchas de las denominaciones (AOC) francesas.
Los veranos cada vez más calurosos, debido al cambio climático, han sido un catalizador para que los elaboradores de la región combinen las prácticas tradicionales con técnicas avanzadas, manteniendo la calidad de los vinos en estas difíciles condiciones. Su reinterpretación de las prácticas vitícolas y de vinificación ha dado lugar en los últimos años a un abanico muy amplio de vinos centrados en el terroir. Las secas condiciones ambientales también han propiciado que el Languedoc sea la principal zona de producción de vinos ecológicos en toda Francia.
La mayoría de los vinos de Languedoc son tintos elaborados con una mezcla de Garnacha, Syrah, Cariñena (Carignan), Monastrell (Mourvèdre) y Cinsault, seguidos de vinos rosados y blancos, muchos de los cuales se elaboran con Marsanne, Rousanne y Viognier. Variedades típicas del Ródano.
También se elaboran excelentes espumosos (principalmente a partir de Chardonnay) siguiendo el método tradicional. Llamarlo método Champenoise supone cierta controversia en la zona, ya que parece haber pruebas, en documentos de hace 500 años, de indicarían que el método Champenoise en realidad se empezó a utilizar en el Languedoc, en la zona de Limoux. El Languedoc completa su amplia oferta con excelentes vinos dulces, principalmente de uva Moscatel, bajo cuatro denominaciones.
Las cinco denominaciones más conocidas en Languedoc son Languedoc AOC (también conocida como Coteaux du Languedoc), Corbières AOC, Faugères AOC, Minervois AOC y Saint-Chinian AOC.
El Rosellón (Roussillon)
El Rosellón (Roussillon) es la sub-región más pequeña (con únicamente el 10% de la producción de la región), y se encuentra entre las montañas de Corbières al norte, los Pirineos al oeste y el macizo de Albères en la frontera con Cataluña en España.
Los viñedos aquí se encuentran en valles estrechos y llanuras entre las montañas. Tres ríos cruzan el Rosellón: Agly, Têt y Tech. Esto da lugar a una topografía muy diversa y a muchos terroirs únicos, que aportan características específicas y tipicidad a los vinos.
Esto, junto con las 24 uvas autorizadas en las 15 denominaciones del Rosellón, hace que sea muy complicado generalizar sobre el estilo y las características de los vinos de la zona. Los vinos de calidad del Rosellón tienen cada uno su carácter e identidad propia, así que merece la pena adentrarse y explorar. ¡Entra en Avelyn y descúbrelos con nosotros!
Maridaje de los vinos de Languedoc-Roussillon
Cuando quieras maridar los vinos de Languedoc-Roussillon, piensa en Francia, en el mar Mediterráneo y los pueblos de montaña. Cada plato tiene un buen aliado en los vinos de la región.
Los tintos con más cuerpo, como los de Minervois, Saint-Chinian, Corbières y Faugères, combinan bien con asados, caza con salsas sutiles, queso azul y ensaladas con casquería. Los tintos más ligeros, de Languedoc, Corbières, Cabardès, Minervois, combinan bien con carnes a la brasa con hierbas provenzales y con un plato clásico mediterráneo francés: la ratatouille. Recuerda que debes enfriar ligeramente los tintos hasta 14-16ºC. Esto ayuda a resaltar y dar mayor frescura a la fruta.
A continuación, se cierran las botellas con el tapón definitivo y se dejan reposar unos meses antes de lanzarlas al mercado para su disfrute.
Los rosados siempre maridan bien con aceitunas y tapenades, con entrantes, ensaladas ligeras, carnes blancas, pescados, verduras con hierbas provenzales, con pizza. Es decir, ¡son súper versátiles!
En cuanto a los blancos, si es de un estilo más ligero, pruébalo con pescado, marisco, sopas de pescado (bouillabaisse) y queso. Como sencilla pauta: cuanto más fuerte es la comida, más cuerpo debe tener el vino.
¿Y los espumosos? Eso es fácil: aperitivos, mariscos y la mayoría de las cosas saladas y fritas. En cuanto a los postres, fruta, dulces con chocolate y repostería.
Preguntas frecuentes:
¿Qué tienen de especial los vinos de Languedoc-Roussillon?La transformación de una producción masiva a la elaboración cuidadosa de vinos de calidad centrados en el terroir.
¿Cuáles son las variedades de uva más típicas de Languedoc-Roussillon?Tintas: Garnacha (Grenache), Syrah, Cariñena (Carignan), Monastrell (Mourvèdre) y Cinsault.Blancas: Marsanne, Rousanne y Viognier.
¿Qué tipo de comida va bien con los vinos de Languedoc-Roussillon?Mediterránea: Carnes a la brasa con hierbas provenzales, pasteles de carne, ratatouille. Productos del mar, mariscos, sopas de pescado.